Para varias madres, el vivir el embarazo y el parto significa una experiencia que viene acompañada de cierta tristeza, miedo, ansiedad y conflictos a la hora de tomar decisiones. Ya de por sí existen madres que no cuentan con la energía suficiente para cuidarse a ellas, sus bebés y el resto de familias. Esto representa un síntoma de depresión cuando alcanza niveles de autolesión o deseos de herir a otros incluyendo sus hijos.
La depresión posparto es un problema del que vale la pena hablar para ayudar a comprender más las necesidades psicológicas de las madres y hacerles ver que no están solas.
En términos simples
La depresión postparto es la situación en la que el estado anímico de tristeza empeora con el paso de los días. Además el estado de depresión es el carácter más profundo de la afectación.

Esta depresión es una realidad que sufre una de cada diez mujeres tras el parto.
La enfermedad puede persistir meses o incluso años si no se trata adecuadamente. Los síntomas como el sentimiento de culpa, la ansiedad, la pérdida de la concentración o los sentimientos negativos hacia el bebé pueden estar indicándonos la presencia de esta entidad.
En ocasiones, la creencia por parte de la madre es de que debería estar muy feliz. Y que no tiene derecho a sentirse algo desbordada o sobrepasada, genera que no expliquen su estado depresivo grave.
Razones hormonales
Entre las diferentes razones por las que una madre llega a deprimirse están los cambios hormonales que sufren sus cuerpos. Cuando una mujer alcanza el embarazo, su cuerpo produce hormonas femeninas llamadas estrógeno y progesterona en cantidades mayores a las normales. Pero dentro de las 24 hrs después del parto, los niveles de estas hormonas disminuyen velozmente y el repentino cambio propicia una depresión parecida a la que se ve con los ciclos menstruales habituales.
En algunas mujeres, otra causa de estos síntomas post embarazo es una disminución de las hormonas de la glándula tiroides. Estas hormonas ayudan a regular la manera en que el cuerpo usa la energía. Los bajos niveles de la tiroides pueden ocasionar sentimientos de depresión, irritación, problemas para dormir, para concentrarse e incluso aumento de peso.
Entonces, al considerar los cambios físicos junto a los de estilo de vida por la llegada de un hijo, el sentirse abrumada es algo más frecuente de lo que se cree entre las mujeres. Estas nuevas responsabilidades se juntan con una presión por ser madres ejemplares y sentir que su vida avanza muy rápido nos ocasiona un escenario de tristeza.

Los tratamientos principales consisten en: Consulta a un psicólogo o a una psiquiatra y tratamientos médicos antidepresivos si es necesario.
Tipos de depresión durante y después del embarazo
1. Tristeza posparto
Muchas mujeres sufren de tristeza después de dar a luz. Inclusive se estima que del 50 % al 80 % de las madres la sufren. En la mayoría de los casos, la tristeza posparto es algo temporal y generalmente desaparece en unos días (durando hasta 2 semanas después del parto)
Algunos síntomas:
- Padecer de cambios de estado de ánimo
- Sentirse triste, ansiosa o abrumada
- Tener episodios de llanto
- Perder el apetito
- Presentar problemas para dormir
2. Depresión perinatal
La depresión posparto abarca la depresión prenatal (durante el embarazo) y la depresión posparto (durante el primer año después del parto). Los síntomas de esta depresión perinatal suelen durar más tiempo que los de la «tristeza posparto», siendo a su vez más severos. Se presenta en 1 de cada 5 mujeres.
Síntomas frecuentes:
- Dormir demasiado o no poder dormir
- Ausencia del disfrute de la vida
- Entumecimiento emocional
- Dificultad para concentrarse, recordar cosas y tomar decisiones
- Falta de interés del cuidado personal
- No sentir ganas de hacer tareas cotidianas
- Alejarse de familiares y amigos

Algunas recomendaciones útiles para ayudar con los síntomas son: Evitar pasar demasiado tiempo sola, pedirle ayuda y apoyo a su pareja o a sus familiares y amigos, unirse a un grupo de apoyo para madres nuevas y hacer suficiente ejercicio.
3. Psicosis posparto
Una cantidad muy pequeña de mujeres (1 o 2 de cada 1.000 mujeres) puede sufrir de una forma poco usual y severa de la depresión posparto conocida como ”psicosis posparto». Las mujeres que son diagnosticadas con trastornos bipolares o con trastorno esquizoafectivo corren mayor riesgo de sufrir de este problema.
Entre sus síntomas están:
- Extrema confusión
- Sentimiento de desesperanza
- Imposibilidad para dormir (incluso cuando está agotada)
- Rehusarse a comer
- Desconfiar de otras personas
- Ver cosas o oír voces que no existen
- Pensamientos de hacerse daño, hacerle daño al bebé o a otras personas
Es importante acotar que los padres también pueden pasar por la depresión posparto, esto les dificulta ayudar a sus parejas y a los niños; esto aumenta el riesgo de la depresión materna. Sin embargo, diagnosticada a tiempo, como en el caso de las madres, se puede tratar. Haciendo así los síntomas pasajeros.
GUÍA SALUD Y VIDA te invita a acudir con un profesional oportunamente para que las primeras señales de desánimo, tristeza y episodios de ansiedad ante esta nueva responsabilidad llamada maternidad sean tratados y no terminen en casos más profundos y lamentables.
FUENTES:
https://www.gomezroig.com/depresion-postparto/
Curado por Luis J. Centeno.
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