¿Qué alimenta tus pensamientos?
Normalmente es en la oscuridad y en los momentos en que nos sentimos solos cuando alimentamos nuestros pensamientos con cosas incorrectas y con negatividad.
Me parece curioso que estemos acostumbrados a renovar nuestro pasaporte, nuestra licencia de conducir, nuestra casa, nuestro auto y nuestro closet. Renovamos tantas cosas y fallamos en lo más importante: nuestra forma de pensar.
De todas las cosas, la única que al final del día determinará nuestra medida de fe, la forma como vemos a Dios y como caminamos con él es nuestra mentalidad.
Y para renovar nuestra mente es necesario que alimentemos nuestros pensamientos con la palabra de Dios. Dijo Gandhi una vez que el hombre se convierte en lo que piensa.
Pero renovar nuestra forma de pensar no es un concepto de la metafísica, es bíblico.
Dios quiere que su palabra determine lo que hay en nuestra mente. Como personas de fe, no debemos tener miedo de analizar, de hacernos preguntas y de crecer en nuestra mente. La fe no nos lleva a ser necios.
Tomemos responsabilidad sobre nuestra mentalidad, para que el día de mañana, cuando se nos presente un problema, nuestros pensamientos no fallen ni se nuble nuestra perspectiva.
Hoy quiero animarte a que tomes la decisión de hacer cautivos los pensamientos incorrectos.
Pensar en lo correcto es una decisión diaria que tendrás que tomar. Puede parecer difícil, pero recuerda que, si levantas el nivel de tus pensamientos, levantarás el nivel de tu vida.
Citas Bíblicas para estudiar:
Filipenses 4:8
2 Corintios 10:4-5
Amén
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